Una bonita historia os voy a contar
sobre un amor imposible y un feliz final.
Una hermosa cebolla por un puerro sufría
por ese extraño amor que nunca conseguiría.
Eso pensaba ella en las noches que dormía,
si conseguía coger el sueño algún día.
Un leve haroma le llegó a la cebolla,
un olor de su amor perteneciente a la olla.
Abundante rábia se apoderó sigilosa
al oler junto a él a una escarola.
La cebolla, con pena, se echó a llorar,
todo el mundo sabía lo que iba a pasar.
El puerro enseguida se echó a nadar,
junto a la cebolla se quería desahogar.
El puerro no se dió cuenta de lo que sentía
hasta que no estuvo cerca de esa cría.
Su amor desperto, junto a ella soñaría
todas las noches, hasta que les dure la vida.
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