El platano en la nevera estaba,
y la naranja lo acompañaba,
el limon cantaba,
y el melon lloraba.
El pomelo se sentó,
mientras el kiwi durmió,
la fresa se abrazó,
y el melon un beso le dió.
La naranja con su sabor,
el limon con su esplendor,
el pomelo con du dulzor,
a todos enamoro.
La fresa cansada,
la naranja acabada,
se ajuntaron en la ensalada,
y se las comieron en nada.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario